Los vinilos están de moda, todos quieren tener una pieza impresa en este papel autoahesivo que después pueden pegar en su pared favorita.
Uno de sus atractivos más importantes es precisamente eso de la personalización que se puede aplicar en dos sentidos:
• Escoger un diseño particular y mandarlo a imprimir de acuerdo a tu gusto y creatividad.
• Elegir un papel con diseño predeterminado para personalizar ese lugar especial para ti.
Cómo escoger el vinilo ideal
Esta etapa es muy personal, se trata de escoger todos los detalles que deseas plasmar en tu vinilo.
Lo primero es pensar en el diseño si quieres uno en particular, debes conseguir a un profesional que te ayude a montarlo digitalmente.
En caso de buscar un modelo predeterminado, tienes infinidad de opciones y hasta catálogos para decidir cuál es el que se adapta más a tu decoración y gusto.
Antes de hacerlo responde estas preguntas:
1. Quieres expresar algo en particular con el vinilo.
2. Sabes en qué lugar lo colocarás.
3. Conoces la dimensión del espacio.
4. Quieres aprovechar para combinar con algunos colores específicos.
5. Necesitas que los vinilos posean características particulares como resistencia al agua u otros aspectos determinados por el área en el que lo colocarás.
La idea es que tengas una visión previa y planificada del uso que le darás al materuak.
De esa forma podrás sortear algunas dificultades y aprovechar todas las ventajas de este tipo de papel.
Ventajas de decorar con vinilos
La decoración con vinilo tiene ventajas particulares, que van más allá del empleo de un material que está de moda y además luce realmente atractivo en el lugar donde se utilice.
Entre los beneficios se encuentran:
1. Economía, puedes conseguir muy buenos precios con el uso del vinilo.
2. Fácil instalación y mantenimiento.
3. Gran variedad de alternativas en cuanto a texturas, colores y diseños.
4. Puedes utilizarlo como material para la restauración daños en estructuras.
5. No solo se aplica en paredes. El vinilo es utilizable incluso en la restauración de muebles.
Pero además de todo esos puntos realmente importantes de por sí; si logras conseguir el diseño deseado y armar el ambiente que quieres, el vinilo te servirá como catalizador de emociones.
De allí la importancia de planificar muy bien lo que harás con él.
Qué más puedes hacer con el vinilo
Sin duda alguna, se trata de un material muy versatil. Que te deja libre un espacio para decidir su uso, gracias a la calidad del mismo.
Todo dependerá de tu creatividad. Pero presta atención a estas ideas prácticas que te pueden servir de guía.
1. Marco para espejo: qué tal si en el centro de una pared colocas un espejo cuyo marco sea un diseño atrevido o clásico en vinilo.
2. Respaldo de cama: muchas veces no tenemos espacio para una cama grande en el cuarto; por eso utilizar vinilos como espaldar es una maravilla.
3. Tabla organizadora de pared: busca un diseño tipo organizador para pegar en la pared y deja espacios sin uso en los que agregarás postits para colocar tus actividades o tareas pendientes.
4. Recetario de cocina: utiliza un muro de tu cocina donde coloques una base de vinilo para agregar recetas diarias.
Los vinilos te salvarán la partida en muchas ocasiones, aprovecha su uso en la medida de tus posibilidades y dale forma a tus ideas con este material.
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